Pollo Parmesano

Tiempo de preparación: 10 minutos

Tiempo de cocción: 40 minutos

Rendimiento: Para 4 personas

Oh, cómo nos encanta el pollo parmesano, frito, sofocado con salsa de tomate, cubierto con quesos mozzarella y parmesano, y horneados hasta el queso es burbujeante y se derrite en cada rincón.

Es una de esas recetas que todo el mundo debe saber cómo hacer. Es fácil y se junta rápidamente. El pollo parmesano es también uno de los mejores usos que puedo imaginar para pechugas de pollo sin hueso, sin piel.

Un truco que ahorrará un poco de tiempo con la elaboración de la salsa es pelar y rallar la cebolla en lugar de cortarla. Utilice los agujeros grandes de un rallador de la caja. La cebolla se cocinará más rápido de esta manera, liberar más de sus jugos, y su salsa se reunirá más rápidamente.

Su salsa  será tan buena como sus tomates, así que utilice un tomate enlatado de buena calidad!

Rayar la cebolla creará más pequeñas piezas de cebolla y liberar más de los jugos de la cebolla, y es más rápido que cortar.

Ingredientes

Salsa:

1/2 cebolla grande, rallada (no corte la cebolla por la mitad, sólo rallar la mitad de una cebolla entera), aproximadamente 3/4 taza de cebolla rallada

1/4 taza de aceite de oliva

2 dientes de ajo medianos, pelados y picados

1 lata (28 onzas) de tomates triturados

1 cucharadita de orégano seco

Pizca de pimiento rojo

Una pizca de azúcar

Pollo:

4  Pechuga de pollo

Sal

2 huevos

1 taza de pan rallado (hacemos nuestro pan rallado piezas corrientes de pan francés rancio a través de una licuadora o también lo puedes rayar)

1 taza de queso parmesano recién rallado

1/4 taza de aceite de oliva

2 cucharadas de hojas de albahaca fresca, en rodajas finas

8 onzas de queso mozzarella, en rodajas

1 Saltee las cebollas, añada el ajo, añada los tomates y las especias: Primero inicie con la salsa y mientras la salsa se está cocinando, puede proceder con el pollo. Calentar el aceite de oliva en una cacerola a fuego medio-alto. Añadir las cebollas y saltear durante 2-3 minutos.

Añadir el ajo picado. Cocine hasta que esté fragante, aproximadamente un minuto más.

A continuación, agregue los tomates triturados, orégano, copos de pimiento rojo y azúcar. Llevar a fuego lento, reducir el calor para mantener el fuego a fuego lento. Cocine, descubierto mientras prepara el pollo (unos 10-12 minutos).

2 Precaliente el horno a 400 ° F.

3 Pechugas de pollo delgadas: Coloque las pechugas de pollo una a la vez entre dos capas de plástico o papel encerado. Utilice un martillo de la carne, un mazo, un rodillo, o incluso una botella de vino vacía pesada para librar o rodar los pedazos del pollo a un grueso uniforme. Espolvorear la sal a ambos lados del pollo.

4 Preparar pan rallado y huevos para el empanizado: En un tazón poco profundo (lo suficientemente grande como para empanizar las pechugas), mezcle el pan rallado, 1/2 taza de parmesano y una pizca de sal. En un tazón poco profundo, bata los huevos.

Caliente 1/4 taza de aceite de oliva en una sartén grande a fuego medio-alto hasta que el aceite esté caliente.

Trabajando una pechuga a la vez, sumerja la pechuga de pollo en la mezcla de huevo y luego en el pan rallado. Trabajando en lotes para no aglomerar la sartén, coloque las chuletas empanizadas en la sartén.

Baje el fuego a medio y fríe las pechugas de pollo hasta que estén doradas en cada lado, aproximadamente 3 a 4 minutos por lado.

6 Arregla la salsa, las pechugas en la cacerola, cúbrela con la albahaca y el queso: Esparza suficiente salsa de tomate para cubrir espesamente el fondo de la cacerola o plato para hornear..

Cubrir con una cuchara la salsa de tomate sobre cada una de las pechugas. Espolvorear la parte de arriba con albahaca en rodajas. A continuación, poner rodajas de mozzarella sobre cada pechuga y espolvorear con el resto de 1/2 taza de queso parmesano.

7 Hornear: Hornear en el horno a 400 ° F durante 10-12 minutos, o hasta que la mozzarella empiece a dorarse.

Servir con pasta y la salsa restante, o en un rollo de pan grande.